Toby apareció abandonado en el campo, lleno de pulgas y empapado de agua y barro. Preguntamos por las casas cercanas, y como siempre…nadie sabía nada. No pudimos dejarlo allí solito, con tanto frio y tan peque sin saberse buscar la vida, así que nos lo llevamos. No estaba delgado, cosa que quiere decir que hacía muy poco que lo habían abandonado. Fue una suerte encontrarlo tanto para el como para nosotros. Ahora hay que intentar darle una oportunidad a este pobre cachorrito. BL/M